En un debate tenso, lleno de ataques mutuos, Hillary Clinton dijo que los comentarios vulgares y machistas de Donald Trump sobre las mujeres revelan “exactamente quién es él” y que son este tipo de cosas lo que lo hacen no apto para ser presidente.
Trump reconoció no estar “orgulloso” de la conversación captada por los micrófonos hace una década y la minimizó como nada más que “una charla de vestuario”, pero luego de asegurar estar “avergonzado”, trató de cambiar de tema diciendo un “pero vamos a derrotar a ISIS”.
Obligado por los moderadores, Marth Raddatz y Anderson Cooper, Trump regresó al tema negando que alguna vez haya besado o tocado a una mujer sin su consentimiento. “Ese no soy yo. Tengo mucho respeto para las mujeres, nadie tiene más respeto que yo por las mujeres”, añadió. “Son palabras, amigos, solo palabras”.
Clinton respondió: “Dice que el video no lo representa, pero creo que todos sabemos lo que exactamente es”, le respondió Clinton. “Lo hemos oído insultar a las mujeres, clasificar a las mujeres, lo hemos oído denigrando a una ex miss Universo. Asi que, sí, ese es Donald Trump. Pero no solo es así con las mujeres, también ha atacado así a los inmigrantes, musulmanes, latinos, excombatientes, musulmanes”, agregó.
Sus ataques contra Trump continuaron. “Si solo fuera un video sería comprensible. Pero nunca se disculpa con nadie” ni por nada dijo Clinton.
Ella recordó que nunca se disculpó con la familia de un soldado musulmán a la que atacó durante una semana, ni con el juez de origen hispano al que acusó de parcial por su origen, ni con el periodista del que se burló por ser incapacitado, ni por la mentira de que el presidente no era estadounidense.
Trump había comenzado el debate con una andanada de insultos contra Clinton, acusándola de haber “mentido sobre muchas cosas”, llamándola el “diablo” y amenazando que de llegar a ser presidente nombrará a un “fiscal especial” para investigar su uso de un servidor de correos privados mientras fue secretaria de Estado.
“Sería mejor que alguien como Donald Trump no esté a cargo de la justicia”, atinó a responder Clinton. “Porque estarías en la cárcel”, remató Trump.
Trump hizo un mucho mejor debate que el primero. Se mostró mucho más controlado, atacó con fuerza a Clinton y su historial de más de 30 años, y una y otra vez la acusó de ser “todo palabras y nada de acción”.
Clinton intentó revivir el escándalo de la semana pasada cuando se reveló que Trump puede no haber pagado impuestos durante 18 años, pero él no se inmutó y aceptó sin problemas haber usado los hoyos legales para evitar pagar.
“Por supuesto que lo hago. Por supuesto que sí. Y así lo hacen también todos los donantes (políticos) de ella”, dijo.
El segundo debate tuvo un formato de cabildo abierto en el que varios votantes indecisos sentados alrededor del escenario seleccionados por la firma Gallup, hicieron algunas de las preguntas directamente a los candidatos.
La última pregunta fue sobre lo que consideraban bueno de su rival. “Respeto a sus hijos y eso dice mucho sobre Donald”, dijo Clinton sobre la familia de Trump.“No estoy de acuerdo con lo que dice y lo que hace, pero respeto esto”.
La respuesta de Trump a la misma pregunta fue hasta cierto punto sorprendente. “Ella no se rinde, es una luchadora”, dijo.
Y con eso terminó el debate, con un frío y forzado apretón de manos —que Trump propició— como nunca se vio al principio del evento cuando solo se saludaron de “hola”.
La cuestión, por supuesto, es ¿quién ganó?
Sin nocaut
Para Anthony Zurcher, corresponsal de la BBC en Washington, Trump volvió a ofrecer "ensaladas de palabras" cuando hablaba de sus propuestas políticas sobre reforma sanitaria o Siria.
"Y Clinton volvió a dar una respuesta confusa sobre su servidor de correo electrónico", agrega Zurcher.
"Si algo, el debate resultó en un empate", opina. "Con Clinton por delante en las encuestas, probablemente le venga bien el empate".
"Pero no hubo el nocaut (fuera de combate) explosivo que sus partidarios esperaban".
Y sin embargo analistas y periodistas parecen coincidir en que Trump salió con vida, lo que no es poco.
Según la encuesta que hace el medio estadounidense CNN entre sus televidentes, Clinton ganó con un 57% contra un 34%.
El sondeo hecho por YouGov entre más de 800 votantes registrados le da a Clinton un 47% y un 42% a Trump.
Es de prever que tanto Clinton como Trump salgan a declararse ganadores. Y es posible que en esta ocasión sea cierto.
Es decir, la candidata demócrata va por delante en las encuestas y en términos futbolísticos, "le valía el empate".
Eso, junto a que parece poco probable que tras la noche del domingo haya quien salga de la indecisión para votar a Trump, pues es como para darse ganadora.
Y el empresario se debe quedar con aquello de haber salido con vida.
Dada la semana que llevaba, haber conseguido que los partidarios de Clinton vean el debate como una "oportunidad perdida" es para sentirse ganador.
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